
Autoridades del condado de DeKalb, en Georgia, entregaron a Mario Guevara al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) tras su arresto el sábado mientras cubría protestas contra el presidente Donald Trump. (EFE/ FAMILIA GUEVARA)
Los abogados y la familia del periodista tenían la esperanza de que lo liberaran tras cumplirse el plazo de 48 horas de la retención que le impuso ICE
El periodista salvadoreño Mario Guevara, uno de los reporteros hispanos más reconocidos en el estado de Georgia, fue entregado este miércoles al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), tras ser arrestado el pasado sábado mientras realizaba una cobertura en directo de una protesta contra el presidente Donald Trump.
Guevara, nacido en San Salvador, es fundador del medio digital MG News en Atlanta y cuenta con más de 782,000 seguidores en Facebook.
Su trayectoria en el periodismo incluye trabajos como fotoperiodista en La Prensa Gráfica de El Salvador y como reportero de Mundo Hispánico en Atlanta. En los últimos meses, se había dedicado a documentar los operativos de ICE en la zona metropolitana de Atlanta, ganándose el reconocimiento y seguimiento de amplios sectores de la comunidad inmigrante.
Su arresto ocurrió el sábado en la ciudad de Doraville, mientras transmitía en vivo una manifestación del movimiento “No Kings”. Según su familia y abogados, Guevara se identificó claramente como periodista al ver que los agentes avanzaban hacia él.
Incluso colocó su teléfono en el suelo para seguir transmitiendo. Pese a ello, fue detenido por la policía local y acusado de caminar en una vía vehicular, obstrucción de agentes de seguridad y reunión ilícita.
Una injusticia
Su abogado Giovanni Díaz aseguró: “Mario lleva 20 años haciendo este tipo de trabajo… cumplió con todo lo que le pidieron los oficiales. Los videos son muy claros”. Su esposa, Miriam Guevara, calificó la detención como una injusticia: “Hablé con él el martes. Está de buen ánimo y confiado en que esto se resolverá”, declaró.
Guevara fue trasladado a la cárcel del condado de DeKalb y, pese a los esfuerzos de su familia y abogados por obtener su liberación bajo fianza, fue entregado a ICE la madrugada del miércoles, lo que ahora abre un proceso de deportación en su contra.
Su situación migratoria es compleja: cuenta con permiso de trabajo en EE. UU., su caso de deportación había sido “cerrado administrativamente”, y está gestionando la regularización de su estatus a través de su hijo ciudadano estadounidense, quien ha necesitado intervenciones quirúrgicas.
El arresto ha generado rechazo en organizaciones defensoras de la prensa. El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) lo calificó como “una cruda forma de censura“.
Por su parte, la Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) expresó: “Esta detención y posible deportación sentaría un precedente negativo para la prensa hispana y el ejercicio periodístico”.
La APES también pidió a las autoridades salvadoreñas que garanticen la protección del periodista y el apoyo consular necesario.
Guevara es una figura clave para la comunidad migrante en Georgia, con un trabajo que se ha centrado en dar voz a quienes enfrentan redadas y operativos migratorios. Su familia y abogados continúan luchando por su liberación.
Denuncian perfil racial por detenciones de latinos estadounidenses en redadas migratorias
ICE arresta a ciudadanos latinos en Los Ángeles, incluyendo embarazada encadenada que dio a luz antes de tiempo

Las detenciones de latinos ciudadanos estadounidenses en medio de las redadas migratorias en Los Ángeles, que han incluido a una embarazada que dio a luz a su hijo antes de la fecha prevista, han alimentado las acusaciones contra los agentes federales por el supuesto uso del “perfil racial“.
Después de catorce días de operativos continuos del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Los Ángeles, cientos de personas han sido detenidas, pero no todas son inmigrantes indocumentados, y entre los arrestos cuestionados ha habido un sinnúmero de latinos nacidos en EE. UU., denuncian activistas y defensores de los inmigrantes.
“Esto es un caos”, opina Angélica Salas, directora de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA). “Los ciudadanos estadounidenses están siendo detenidos y desaparecidos por su color de piel”, valora.
Encadenan a embarazada
Ese sería el caso de Cary López Alvarado, una embarazada de nueve meses, que fue detenida por agentes federales enmascarados el pasado 8 de junio en el área de Hawthorne junto al padre de su hijo, Brayan Nájera, y su primo Alberto Sandoval, este último también ciudadano estadounidense.
A pesar de sus protestas, la joven de 23 años fue llevada con su novio y su primo a un centro de procesamiento de la Patrulla Fronteriza, donde, según ella, los agentes asumieron automáticamente que era indocumentada, según le contó a KTLA.
“(Dijeron) ‘Pero eres de México, ¿verdad?‘ Y yo les respondí: ‘No, soy de aquí’. Y me preguntaron: ‘¿Dónde es aquí?’ Y yo les respondí: ‘Aquí, en Estados Unidos, en Los Ángeles'”, recordó la hispana a la televisora.
López fue encadenada desde las manos hasta las piernas. Aseguró que sintió que la cadena ejercía demasiada presión sobre su vientre y tuvo que maniobrar para no hacerse daño.
La latina fue dada de alta tras quejarse de dolores y fue directamente a un hospital, donde comenzó a tener contracciones.
Cuatro días después, la mujer dio a luz a una niña sana, que no ha conocido a su padre, porque este fue enviado a un centro de detención migratorio en Texas.
El abogado Luis Carrillo, que representa a López, calificó de “indignante y desgarrador” el arresto de la ciudadana estadounidense.
“Este aumento de fuerza por parte de agentes federales fue totalmente innecesario y podría haber causado un aborto espontáneo a nuestra clienta debido al estrés del incidente”, indicó a EFE el jurista.
La angustia de López no termina, ya que Nájera era el proveedor de la familia. A esto se suma que el inmigrante, oriundo de Guatemala, fue trasladado a un estado lejano donde es más difícil que obtenga una buena representación legal y pueda quedarse en el país.
El atropello al trabajador de Walmart
Las denuncias de latinos ciudadanos estadounidenses se han multiplicado conforme pasan los días del operativo en Los Ángeles, que, según la secretaria de Seguridad Nacional, Kirstjen Nielsen, podría durar hasta 60 días.
Este martes, cerca de mil vecinos de Pico Rivera, una zona eminentemente latina, se manifestaron en un centro comercial para protestar por el trato dado a Adrián Andrew Martínez, de 20 años, un trabajador de Walmart.
El joven fue detenido tras una violenta confrontación física con cerca de media docena de agentes federales que cuestionaban a otro trabajador.
Vídeos de testigos que captaron la escena muestran cómo Martínez fue agarrado por el cuello por uno de los oficiales, y después tirado violentamente al suelo, a pesar de que varias personas decían que el joven era un ciudadano estadounidense y trabajador de la tienda.
Steve Carmona, administrador de Pico Rivera, dijo a los medios que “estaba muy preocupado” por lo que estaba pasando a los residentes por las redadas migratorias.
“Tengo mi pasaporte“
Una escena similar ocurrió el jueves pasado en la ciudad de Montebello, vecina de Pico Rivera, cuando Javier Ramírez fue detenido fuera de su negocio.
“¡Tengo mi pasaporte! ¡Tengo mi identificación! ¡Soy ciudadano estadounidense!”, dijo el latino a los agentes mientras lo arrestaban, según un video del incidente que se ha vuelto viral.
El hombre fue detenido por las autoridades migratorias, junto a uno de sus trabajadores.
En los tres casos, las autoridades federales han argumentado que los ciudadanos fueron arrestados por obstruir las acciones de los agentes de ICE.