
Foto de archivo ilustrativa de una marcha frente a la embajada de EEUU en Irak, en Bagdad Ene 1, 2020 (REUTERS/Thaier al-Sudani)
Las tensiones en la región han ido aumentando en los últimos días a medida que las conversaciones entre Washington y Teherán sobre su programa nuclear en rápido avance parecen haber llegado a un punto muerto
El Departamento de Estado se prepara para ordenar la salida de todo el personal no esencial de la embajada de Estados Unidos en Bagdad, Irak debido a la posibilidad de disturbios regionales, dijeron el miércoles dos funcionarios estadounidenses.
La embajada de Bagdad ya contaba con personal limitado y la orden no afectará a un gran número de personal.
Sin embargo, el departamento también autoriza la salida de personal no esencial y familiares de Bahréin y Kuwait. Esto les da la opción de decidir si abandonan el país.
La decisión de Estados Unidos llegó tras una nueva amenaza de Irán, que advirtió el miércoles que atacará las bases militares estadounidenses en Oriente Medio en caso de conflicto con Washington.
Si “se nos impone un conflicto, la otra parte sufrirá sin duda más pérdidas que nosotros”, declaró el ministro iraní de Defensa, Aziz Nasirzadeh. “Sus bases están a nuestro alcance” y “Estados Unidos deberá abandonar la región”, agregó.
El Pentágono está preparado para apoyar una posible evacuación del personal estadounidense de la embajada de Estados Unidos en Bagdad, dijo otro funcionario estadounidense.
Los funcionarios hablaron bajo condición de anonimato para detallar planes que no se han hecho públicos.
Las tensiones en la región han ido aumentando en los últimos días a medida que las conversaciones entre Estados Unidos e Irán sobre su programa nuclear en rápido avance parecen haber llegado a un punto muerto.
Mientras tanto, la Junta de Gobernadores del Organismo Internacional de Energía Atómica estaba a punto de votar sobre una medida para censurar a Irán. Esto podría impulsar un intento de reimponer las sanciones de las Naciones Unidas contra Irán mediante una medida del acuerdo nuclear de 2015 entre Teherán y las potencias mundiales, que sigue vigente hasta octubre.

En medio de los informes sobre los preparativos para la salida de las embajadas, la misión de Irán ante la ONU publicó en las redes sociales que “las amenazas de fuerza abrumadora no cambiarán los hechos”.
“Irán no busca un arma nuclear, y el militarismo estadounidense sólo alimenta la inestabilidad”, escribió la misión iraní.
El ministro de Defensa iraní, general Aziz Nasirzadeh, dijo por separado a los periodistas el miércoles que esperaba que las conversaciones con Estados Unidos dieran resultados, aunque Teherán estaba dispuesto a responder.
“Si se nos impone un conflicto, las bajas del oponente sin duda serán mayores que las nuestras, y en ese caso, Estados Unidos debe abandonar la región, porque todas sus bases están a nuestro alcance”, declaró. “Tenemos acceso a ellas y las atacaremos a todas en los países anfitriones sin dudarlo”.
Más temprano el miércoles, un comunicado del Centro de Operaciones Comerciales Marítimas del Reino Unido, un esfuerzo con sede en Medio Oriente supervisado por la marina británica, emitió una advertencia a los barcos en la región de que “se ha informado del aumento de las tensiones dentro de la región que podría conducir a una escalada de la actividad militar con un impacto directo en los marineros”.
Instó a la cautela en el Golfo Pérsico, el Golfo de Omán y el Estrecho de Ormuz. No mencionó a Irán, aunque en el pasado esas vías fluviales han sido escenario de incautaciones y ataques de buques iraníes.
(Con información de AP)
Donald Trump: “Irán no puede tener armas nucleares, no lo permitiremos”
Las palabras del mandatario llegaron en medio de las crecientes tensiones con el país persa y tras confirmar que Estados Unidos está evacuando a su personal en algunos países de Medio Oriente

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este miércoles por la noche que el personal estadounidense en diversos puntos de Oriente Medio estaba siendo evacuado a zonas seguras, en medio de las crecientes tensiones con Irán.
“Bueno, se están retirando porque podría ser un lugar peligroso, no lo permitiremos”, comentó el mandatario, al referirse a la “peligrosa” situación que se vive en la región.
Asimismo, en su breve intervención con la prensa, insistió en que Teherán “no puede tener armas nucleares”, tal como viene asegurando desde su llegada a la presidencia y en cada ronda de negociaciones con el régimen persa.
Más temprano este miércoles, el Departamento de Estado había anunciado que había puesto en marcha diversos operativos para evacuar a todo su personal no esencial de la Embajada en Bagdad, Irak, ante la creciente posibilidad de disturbios regionales. La sede ya operaba con personal limitado, por lo que la reciente orden no afectará de manera significativa la presencia diplomática en esa ciudad.
Según declaró un funcionario del gobierno, se han establecido planes para actuar rápidamente si la situación lo exige, aunque los detalles no trascendieron, por tratarse de información reservada. Las fuentes explicaron que esta preparación es parte de los planes de contingencia que se actualizan regularmente en función de los riesgos regionales y que solo se implementarán si resulta estrictamente necesario.
Asimismo, se autorizó la salida voluntaria del personal no esencial y familiares en las embajadas de Bahréin y Kuwait, tras la última amenaza de Irán sobre la posibilidad de atacar bases militares estadounidenses en Oriente Medio.

La víspera, el ministro de Defensa Aziz Nasirzadeh advirtió que “en caso de conflicto, Estados Unidos deberá abandonar la región” y recordó que “todas sus bases están a nuestro alcance y las atacaremos en cada uno de los países que las acogen, sin dudarlo”.
Ante estas palabras, Trump señaló que “Irán se está volviendo mucho más agresivo” y recordó que no ha descartado la posibilidad de recurrir a la fuerza militar si el régimen insiste en rechazar su propuesta de pacto.
Las tensiones han escalado significativamente luego de que las negociaciones entre Washington y Teherán sobre el programa nuclear iraní se estancaran por discrepancias en sus condiciones, especialmente en la exigencia de la Casa Blanca de que el país persa cese por completo el enriquecimiento de uranio, que le permitiría hacerse con una bomba atómica, pero que la nación niega estar buscando.
Esta situación ha incrementado la preocupación internacional por una posible confrontación directa, provocando que varios países revisen la seguridad de su personal diplomático en Medio Oriente.
De hecho, el Centro de Operaciones Comerciales Marítimas del Reino Unido, supervisado por la marina británica desde Medio Oriente, emitió una advertencia a los barcos que navegan por el Golfo Pérsico, el Golfo de Omán y el Estrecho de Ormuz, tras recibir informes que señalan que el aumento de las tensiones podría provocar una escalada de la actividad militar con consecuencias directas para las tripulaciones.
Así, la alerta recomienda extrema precaución en estas vías estratégicas, que han sido escenarios recurrentes de incautaciones y ataques contra buques atribuidos a fuerzas iraníes.