
PUERTO PRINCIPE.- El Gobierno de Haití informó que dispuso congelar las cuentas bancarias de jefes de bandas armadas, entre estos el poderoso Jimmy Cherisier, alias Barbecue, y el exdiputado Prophane Victor, sancionados por las Naciones Unidas por su vinculación con el blanqueo de capitales, financiación del terrorismo y proliferación de armas de destrucción masiva.
«En lo que respecta a los regímenes de sanciones multilaterales, sobre la base de las resoluciones de las Naciones Unidas, y también sobre la base del decreto del 30 de abril de 2023, la Fiscalía de Puerto Príncipe, instruida por el ministro de Justicia, ha procedido a congelar las cuentas bancarias de las personas sancionadas en el marco de la resolución de las Naciones Unidas», dijo en rueda de prensa el comisario de Gobierno (fiscal) de Haití, Frantz Monclair.
Monclair afirmó que estas acciones se inscriben en el marco de las medidas cautelares solicitadas por el ministro de Justicia haitiano, Patrick Pelissier, tras una orden dirigida al comisario del Gobierno en la que se exigían medidas concretas para aplicar una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, tomada en noviembre de 2022.
En esa oportunidad, el Consejo de Seguridad apoyó la imposición de sanciones y el embargo de armas a grupos armados de Haití que controlan grandes zonas del país, incluidas importantes infraestructuras y vías de comunicación.
Además, establece la prohibición de viajar fuera del país a los líderes de las bandas armadas y la congelación de sus bienes bancarios.
«En esta misma perspectiva, el 6 de junio de 2025, el jefe de la fiscalía (el comisario del Gobierno) solicitó a instituciones especializadas abrir una investigación financiera sobre los sancionados por las Naciones Unidas y sus cómplices por blanqueo de capitales, financiación del terrorismo y financiación de la proliferación de armas de destrucción masiva», añadió Monclair.
Afirmó que el Estado haitiano, como miembro fundador de las Naciones Unidas, está obligado a cumplir las resoluciones adoptadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
«A la valiente población haitiana, a las personas que son víctimas de la inseguridad de las bandas armadas, a los desplazados internos que han abandonado sus hogares, queremos decirles que el Estado haitiano está muy preocupado por el tema de los sancionados y muy preocupado por los criminales transnacionales», declaró el fiscal del país.
En cuanto a las sanciones bilaterales, como las de Estados Unidos, República Dominicana y Canadá, el jefe de la Fiscalía de Puerto Príncipe recordó que el Ministerio de Justicia inició en marzo gestiones ante las embajadas de los países que han impuesto sanciones a haitianos, de lo que él denomina «asistencia penal mutua».
Entre los sancionados por estos países se encuentran ex jefes de Estado como Michel Joseph Martelly, antiguos primeros ministros como Laurent Salvador Lamothe, exparlamentarios y empresarios, entre otros.
El objetivo es «enseñarles más sobre las pruebas o los indicios en los que se basaron para imponer sanciones a nuestros ciudadanos haitianos. Por el momento, se ha iniciado el procedimiento de asistencia penal internacional. El Estado haitiano espera con impaciencia la respuesta de los Estados afectados», comentó.
of-am
Jefes de bandas aún no han sido alcanzados por ataques con drones en Haití, según informes

Panorama Internacional. La Red Nacional de Defensa de los Derechos Humanos (RNDDH), informó que durante las ultimas 48 horas, más de cien supuestos integrantes de las bandas haitianas Gran Ravine y Village de Dieu, murieron tras ataques con drones explosivos.
Estas operaciones dirigidas por el grupo de trabajo creado en marzo por el primer ministro Alix Didier Fils-Aime, han sido intensificadas en las últimas semanas por la Policía Nacional de Haití, y forman parte de una estrategia oficial contra el avance de grupos armados que controlan más del 85% de la capital haitiana.
“Una de las razones por las que estos drones han causado tantas víctimas es porque fueron lanzados sobre una escuela abandonada llamada Maranatha, donde desde hace varios meses tienen su base grupos armados que aterrorizan a la población del sur de la capital”, explicó Pierre Esperance, director general de la RNDDH, en un comunicado.
Los drones suicidas son una herramienta clave debido a que las bandas operan en zonas de difícil acceso terrestre.
De acuerdo al informe, los jefes de banda aún no han sido alcanzados por estos ataques, aunque han perdido a numerosos subalternos y generado temor entre los miembros de las bandas.
En paralelo, las fuerzas policiales han ampliado sus operaciones en distintas áreas de Puerto Príncipe y sus alrededores, entre ellas la comuna de Kenscoff. Lo que ha contribuido a establecer treguas temporales en varias zonas, permitiendo la reanudación de actividades comerciales y escolares que estaban paralizadas por la violencia.
La escalada de violencia en Haití ha dejado un saldo total, desde el inicio de 2024 hasta la fecha, de al menos 5.626 muertes relacionadas con la violencia, además de 2.213 heridos y 1.494 secuestros, según datos verificados por Naciones Unidas.