
Panorama Tecnología. El anunció de esta integración al mercado estadounidense fue realizado la noche del miércoles por los fundadores de Tools for Humanity Alex Blania y Sam Altman, también conocido por estar detrás de OpenIA: ChatGPT.
El dispositivo en forma de esfera que ya está en centros de innovación de Atlanta, Austin, Los Ángeles, Miami, Nashville y San Francisco.
A medida que avanza la tecnología, las suplantaciones y robo de información aceleran sus pasos. Además, cada vez hay que notar con mayor detenimiento qué es real y qué no cuando se está frente a una una foto, un video, un audio o comentarios en redes sociales y textos escritos en portales digitales.
Pero también hay otra maquinaria que no se detiene haciendo uso de la Inteligencia Artificial para humanos: la de identificación de los usuarios.
Dentro de las apuestas para el reconocimiento de identidad está Orb (creado por World, red financiera y de identidad). El dispositivo en forma de esfera que escanea el iris y ha sido tema de conversación y controversias en algunos paíse –incluyendo República Dominicana- ha alcanzado el mercado de Estados Unidos, logrando insertarse en centros de innovación de Atlanta, Austin, Los Ángeles, Miami, Nashville y San Francisco.
El anuncio de esta integración al mercado estadounidense fue realizado la noche del miércoles en el evento At Last por los fundadores de Tools for Humanity Alex Blania y Sam Altman, este último también conocido por estar detrás de la creación de OpenIA: ChatGPT.
Los ejecutivos abordaron “la experiencia” de la World App, donde se reclaman los tokens de Worldcoin, que servirían para transacciones en criptomonedas.
“Necesitábamos algo así: algún método para identificar y autenticar a los humanos en la era de la IA. Necesitábamos una forma de saber qué contenido había sido creado por un humano y por una IA. Queríamos asegurarnos de que los humanos siguieran siendo especiales y centrales en un mundo donde internet iba a tener mucho contenido generado por IA”, explicó Altman sobre el inicio del dispositivo y cómo nació la idea.
Alex Blania recordó que para empezar con el proyecto crearon un grupo humano que se ha convertido en una red de millones de personas.
“Lanzamos una red en julio de 2023, y ese fue el comienzo de un viaje increíble. Muchos altibajos… Y desde nuestra última conversación hace unos seis meses, duplicamos nuestra base de usuarios. Ahora somos 26 millones de usuarios en todo el mundo, 12 millones de los cuales están verificados”, aseguró Blania.
El avance de Orb
Para que el humano sea detectado por Orb debe colocarse frente al dispositivo. Se le mide la altura y si tiene lentes recibe la alerta de que debe retirárselo para completar la verificación. Y en algo han insistido los promotores: los datos se autodestruyen del aparato cuando se confirma la identidad.
Según explica la empresa, para la creación del aparato se utiliza la tecnología de los procesadores NVIDIA Jetson, “que ejecuta sofisticados modelos de IA mediante varios sensores de luz visible e infrarrojos para humanizarlo”.
Los fabricantes de estos equipos también anunciaron que están abriendo su propia línea de ensamblaje en Richardson, Texas. Y pretenden implementar 7,500 Orbs en Estados Unidos durante los próximos 12 meses.
Una versión más pequeña del lector de iris fue presentada también la noche del miércoles. Se trata del Orb mini, una herramienta de verificación portátil y en forma de un casete, con lo que se cambia forma de esfera de la versión normal.
Otras actualizaciones de world
Los impulsores de World también dieron a conocer que tienen en carpeta un proyecto alianzas con Visa (para una tarjeta que no se especificó si sería crédito o débito) y “gaming” (Razer). Con este último se crea un estándar de identidad gamer verificada que funcione en varias plataformas y juegos. La idea es, según explican, mantener la competencia de juegos entre humanos.
Además, la actualización de la World App, la billetera digital del ecosistema; y las integraciones con apps de citas a través de Match Group. Empezarán con Tinder en Japón.
Caso República Dominicana
La práctica de escanear el iris causó polémica en varios países, entre ellos República Dominicana.
En el caso local, el Instituto Nacional de Protección de los Derechos del Consumidor (Pro Consumidor), ordenó el cese de funciones y la Junta Central Electoral prohibió el uso de datos obtenidos de las personas a cambio de criptomonedas, sin embargo, la empresa asegura que no almacena datos de los usuarios.