
Canadá anuncia represalias a aranceles estadounidenses
El gobierno canadiense sumó aranceles de un 25 por ciento a computadores y equipos deportivos estadounidenses, que se agregan a los gravámenes ya impuestos a comienzos de marzo a otros productos.
El Gobierno canadiense anunció este miércoles (12.03.2025) represalias comerciales contra Estados Unidos después de que la administración de Donald Trump pusiera en vigor aranceles del 25 por ciento a las importaciones de acero y aluminio. La respuesta canadiense comenzará a regir el jueves y tendrá un valor de 20.700 millones de dólares estadounidenses.
El ministro de Finanzas de Canadá, Dominic LeBlanc señaló que las represalias canadienses se aplicarán a importaciones de acero de Estados Unidos y a productos como herramientas, ordenadores, equipos deportivos y productos de estampado de hierro, y se suman a los que Canadá ya aplica desde comienzos de marzo a importaciones como bebidas alcohólicas, jugo de naranja y electrodomésticos.
LeBlanc también dejó claro que el Gobierno canadiense “puede imponer” más aranceles en respuesta a las acciones de la administración de Trump. “Nuestro Gobierno seguirá trabajando sin descanso para convencer a la administración de Trump que abandonen totalmente estos aranceles que son absolutamente injustificados”, añadió LeBlanc en una rueda de prensa.
México va a esperar
Por su parte, la ministra de Exteriores canadiense, Mélanie Joly, dijo que “esta va a ser una lucha diaria” y advirtió que durante la cumbre de ministros del G7 que se inicia este mismo miércoles en la localidad canadiense de Charlevoix, planteará la guerra comercial en cada conversación que mantenga con el secretario de Estado de Trump, Marco Rubio.
“En todas las reuniones presentaré el tema de los aranceles para coordinar nuestra respuesta con los europeos y para poner presión a los estadounidenses. Esto es mucho más que economía. Es una cuestión del futuro de nuestro país. La soberanía e identidad canadienses no son negociables”, añadió.
México, el otro miembro del tratado T-MEC junto a Canadá y Estados Unidos, anunció que no tomará represalias inmediatas. La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, dijo que su gobierno esperará hasta el próximo 2 de abril para definir las acciones que tomará ante la imposición de aranceles a las exportaciones mexicanas de acero y aluminio implementadas por Estados Unidos.
DZC (EFE, AFP)
Trump da marcha atrás a subida arancelaria a Canadá
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La relación entre Canadá y Estados Unidos se volvió a tensar este martes (11.03.2025), cuando el presidente estadounidense Donald Trump amenazó a su vecino con duplicar los aranceles previstos a su siderurgia antes de dar marcha atrás horas después.
Por la mañana, el mandatario anunció en su red Truth Social que duplicaría los aranceles aduaneros sobre el acero y el aluminio canadienses que entrarán en vigor el miércoles, pasándolos del 25% al 50%.
Reaccionaba así a la decisión de la provincia canadiense de Ontario de cobrar un recargo a las exportaciones de electricidad a tres estados estadounidenses.
Pero por la tarde, después de una conversación telefónica entre el primer ministro de Ontario, Doug Ford, y el secretario de Comercio estadounidense, Howard Lutnick, Trump cambió de parecer.
“Hay alguien muy fuerte en Canadá que anunció que impondría un recargo a la electricidad. (…) Eso habría sido algo muy malo y no lo va a hacer, respeto eso”, dijo Donald Trump en la Casa Blanca. Y añadió que probablemente reconsideraría duplicar los aranceles.
Su asesor comercial, Peter Navarro, lo corroboró. “Puedo confirmarles eso”, declaró en rueda de prensa consultado sobre si el presidente renunciaría a llevar a 50% las tarifas aduaneras al acero y aluminio de su vecino.
Ford adelantó que hará lo propio con la electricidad, tras una discusión “productiva” con Lutnick, con quien tiene previsto reunirse el jueves en Washington.
Las nuevas amenazas de Trump llegaron horas antes de que a medianoche expire el plazo que el mandatario estableció para imponer nuevos gravámenes a estos productos.
Estas tarifas aduaneras, para las que no contempla excepciones, afectarán a la electrónica, el sector automotor y la construcción.
El país más perjudicado será Canadá, un aliado histórico y, junto con México, su socio en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (T-MEC).
Canadá suministra la mitad de las importaciones de aluminio de Estados Unidos y el 20% de las de acero, afirma el consultor EY-Parthenon.
El futuro primer ministro de Canadá, Mark Carney, prometió el martes que la respuesta de su país cuando tome el poder tendrá “un impacto máximo sobre Estados Unidos y un impacto mínimo en Canadá”.
El domingo ya adoptó un tono desafiante, afirmando que su país “nunca formará parte de Estados Unidos”. “Que los estadounidenses no se engañen. En el comercio como en el hockey, Canadá ganará”, lanzó.
“Tarifas canadienses atroces”
Pero Trump advirtió en Truth Social que si no se elimina lo que él llama “tarifas canadienses atroces” impondrá aranceles a la importación de automóviles a partir del 2 de abril que podrían cerrar “permanentemente el negocio de fabricación de automóviles en Canadá”.
En el mismo mensaje, Trump estimó que “lo único sensato” para Canadá es convertirse en el “51 estado” de Estados Unidos.
“Esto haría que todos los aranceles, y todo lo demás, desapareciera por completo”, sostuvo.
“Los impuestos canadienses se reducirán sustancialmente, estarán más seguros, militarmente y en otros aspectos, que nunca antes, ya no existirá el problema en la frontera norte”, afirmó Trump, quien acusa a su vecino de no hacer lo suficiente para frenar la entrada ilegal de fentanilo, un opiáceo sintético que ha provocado una crisis sanitaria en Estados Unidos.
Ante los aranceles de Trump unos se lamentan y otros se congratulan.
Drew Greenblatt, propietario del fabricante de productos metálicos Marlin Steel con sede en Baltimore, está encantado con los nuevos aranceles sobre el acero importado porque han aumentado sus pedidos.
“Solo usamos acero estadounidense, así que estamos encantados con los aranceles”, declaró a la AFP.
Algunas voces advierten de consecuencias. Los productores que utilizan acero extranjero aseguran que los mayores costos de importación se sentirán en la principal economía mundial.
Un importante fabricante siderúrgico estadounidense avisó que los precios del acero estadounidense aumentarán para igualar los altos costos de los productos importados.
Las restricciones de suministro empujan los precios hacia arriba, haciendo que artículos como los clavos, por ejemplo, sean más caros, explicó el fabricante, que ha pedido permanecer en el anonimato.
Muchos economistas temen que las medidas arancelarias de Trump tengan un efecto inflacionario.
mg (afp, ap)