La Agencia de EE. UU. de Ayuda al Desarrollo Internacional (USAID) está a punto de ser clausurada, según el multimillonario asesor del Gobierno de Donald Trump, Elon Musk, tras un forcejeo por su control.
El multimillonario y director ejecutivo de Tesla Elon Musk, actual responsable del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) en la administración de Donald Trump, asegura que el presidente estaría de acuerdo en cerrar la Agencia de Ayuda al Desarrollo Internacional (USAID), confirma el medio estadounidense Axios.
Musk explicó durante un debate nocturno esta madrugada de lunes (3.02.2025) en una de sus compañías, X Spaces, que ha repasado los problemas de USAID en detalle con Trump y le preguntó varias veces si estaba seguro de que quería cerrarla y aceptó hacerlo, según el medio estadounidense.
“Se hizo evidente que no es una manzana con un gusano dentro”, dijo Musk durante una sesión en vivo en X Spaces, antes conocido como Twitter Spaces. “Lo que tenemos es simplemente una bola de gusanos. Básicamente, hay que deshacerse de todo. No tiene reparación”, afirmó. “La vamos a cerrar”.
Disputa con altos jefes de seguridad de USAID
Sus comentarios se producen después de que el Gobierno pusiera en licencia a dos altos jefes de seguridad de USAID, por negarse a entregar material clasificado en áreas restringidas a los equipos de inspección de Musk, según dijeron un funcionario estadounidense actual y uno anterior a The Associated Press (AP) el domingo.
El exfuncionario dijo que los miembros del Departamento de Eficiencia Gubernamental de Musk, conocido como DOGE, finalmente obtuvieron acceso el sábado a la información clasificada de la agencia de ayuda, que incluye informes de inteligencia.
El equipo de DOGE de Musk carecía de la autorización de seguridad suficiente para acceder a esa información, por lo que los dos funcionarios de seguridad de USAID, John Voorhees y el adjunto Brian McGill, se creyeron legalmente obligados a negar el acceso. Los funcionarios estadounidenses que conocían y comentaron el incidente con AP hablaron bajo condición de anonimato porque no estaban autorizados a compartir la información.
Fondos de USAID congelados, menos para Israel y Egipto
Las declaraciones sobre el futuro de la agencia por parte de Musk, uno de los principales apoyos de Trump en su nuevo Gobierno, siguen asimismo a la decisión del presidente republicano de congelar durante noventa días casi todos los fondos para los programas de ayudas en el exterior de USAID, cuyo presupuesto superó durante la Presidencia de Joe Biden los 60.000 millones de dólares.Israel y Egipto están exceptuados de la congelación de fondos de este organismo, que en 2023 ayudó a 180 países, con Ucrania a la cabeza (más de 17.000 millones de dolares), seguido de Israel (3.300 millones), Jordania (1.686 millones) y Egipto (1.500 millones de dólares).

Axios informa además de que representantes del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), que el multimillonario encabeza, habían visitado la sede de USAID en Washington y accedieron a espacios clasificados y datos de ciudadanos estadounidenses.
Estados Unidos es, con mucho, el mayor donante de ayuda humanitaria del mundo. Pero, desde que Trump accedió a la Casa Blanca para un segundo mandato, la USAID, una agencia federal independiente responsable de planificar y administrar esa asistencia económica y humanitaria en el mundo, ha estado en el punto de mira de su administración y, especialmente, de Elon Musk.
Acceso “sin autorizaciones de seguridad adecuadas”
El multimillonario de origen sudafricano calificó este domingo en su red social X a USAID de “organización criminal” y agregó que “es el momento de que muera”. Trump también llegó a decir el pasado domingo que la agencia, creada en 1961 y que cuenta con más de 10.000 empleados, estaba dirigida por “lunáticos radicales”.
La senadora demócrata Elizabeth Warren dijo en una publicación el domingo que Trump estaba permitiendo a Musk acceder a información personal de los ciudadanos y bloquear la financiación del Gobierno. “Debemos hacer todo lo que esté a nuestro alcance para contraatacar y proteger a las personas de cualquier daño”, dijo la senadora de Massachusetts, sin dar detalles.
Kate Miller, que forma parte de un consejo asesor de DOGE, dijo en una publicación separada que no se accedió a ningún material clasificado “sin las autorizaciones de seguridad adecuadas”.
Mientras, los demócratas del Senado estadounidense escribieron el domingo una misiva al secretario de Estado, Marco Rubio, exigiendo respuestas sobre la visita del personal de DOGE a USAID y la posterior suspensión de licencia del personal superior de la agencia responsable de administrar la ayuda exterior civil y la asistencia para el desarrollo.

Web de USAID cancelada, operación similar en Departamento del Tesoro
Tanto la página web de USAID como sus cuentas en redes sociales han sido canceladas.
La administración Trump y el secretario de Estado Marco Rubio han impuesto una congelación sin precedentes de la asistencia extranjera que ha cerrado gran parte de los programas humanitarios, de desarrollo y de seguridad de USAID en todo el mundo, obligando a miles de despidos por parte de las organizaciones de ayuda.
Todo esto, además, ocurre un día después de que DOGE llevó a cabo una operación similar en el Departamento del Tesoro, obteniendo acceso a información confidencial, incluidos los sistemas de pago de clientes de la Seguridad Social y Medicare. The Washington Post informó que un alto funcionario del Tesoro había renunciado porque el equipo de Musk accedió a información confidencial.
Musk formó DOGE en cooperación con la administración Trump con el objetivo declarado de encontrar formas de despedir a trabajadores federales, recortar programas y recortar regulaciones federales.
rml (efe, ap)
Trump suspende ayuda al desarrollo: las consecuencias
31 de enero de 2025
Estados Unidos congela sus fondos de ayuda. Esto significa que el país donante más importante del mundo ya no está disponible. Desde Botsuana hasta Nepal, la gente sufre las consecuencias.
“Esto llegó sorpresivamente, no habíamos contado con que afectaría a todos los proyectos”, dice Roshan Pokhrel, secretario de Estado en el Ministerio de Salud de Nepal, en entrevista telefónica con DW. A principios de esta semana, llegó un llamado: todos los proyectos financiados por Estados Unidos se suspenden en el país. “Eso nos afecta, sobre todo, en los programas alimentarios y para la salud materno-infantil”, explicó Pokhrel, “y, definitivamente, nos preocupa”.
Ya en el primer día en el cargo, en su segundo mandato, el presidente estadounidense, Donald Trump, decretó que EE. UU. suspendería su cooperación al desarrollo durante 90 días, y los funcionarios y empleados recibieron la orden de abandonar su trabajo.
Vitaminas contra la mortalidad infantil
En el programa nepalés de entrega de vitamina A, por ejemplo, decenas de miles de trabajadores sanitarios viajan a las aldeas más remotas del extremo sur del Himalaya. En el equipaje: cápsulas de vitamina A para más de tres millones de niños.
Estados Unidos financia ese programa desde 1990 en Nepal. Expertos estiman que, gracias a él, se ha podido salvar la vida de aproximadamente 45.000 niños de menos de cinco años, ya que la carencia de vitamina A no solo produce ceguera, sino que también aumenta la propensión a sufrir enfermedades como el sarampión, la diarrea o la malaria.

“Estados Unidos primero”, en lugar de ayudar a otros
Según la agenda “Estados Unidos primero”, de Trump, en el futuro, sólo se financiarán proyectos que puedan demostrar que hacen a Estados Unidos más fuerte, más seguro o más rico.
El Gobierno de Joe Biden, por el contrario, gastó dinero “como un marinero ebrio”, según la portavoz de Trump, Karoline Leavitt, quien afirma que 50 millones de dólares fueron destinados únicamente al envío de preservativos a Gaza. Algo que no es verdad, según se constata en la lista de gastos oficiales de EE. UU. El congelamiento de donaciones de 90 días se realiza a fin de administrar mejor el dinero de los contribuyentes, dijo Leavitt.
Estados Unidos, hasta ahora el mayor donante
“Esto es algo masivo, porque Estados Unidos es el mayor donante de ayuda al desarrollo”, señala el politólogo Stephan Klingebiel, del grupo de expertos en desarrollo German Institute of Development and Sustainability (IDOS). Y agrega que una gran parte del dinero para el desarrollo a nivel mundial viene de Estados Unidos. En 2023, fueron unos 68.000 millones de dólares, según datos oficiales de ese país. “Si a partir de ahora todo se paraliza literalmente, esto afectará muy directamente a la gente”, subraya Klingebiel.
Después del decreto de Trump, se suspendió la ayuda a los refugiados en el norte de Siria, los heridos de guerra en Ucrania ya no recibieron prótesis y ya no se retiraron más minas en Sudán.
¿Cuáles son las excepciones?
Además de la indignación y la confusión de organizaciones de ayuda humanitaria por la medida de Trump, ya que no siempre está claro qué proyectos se ven afectados y cuáles pueden continuar. Los tribunales estadounidenses cuestionan la legalidad del congelamiento del gasto, pero este cuestionamiento no detiene la paralización de la ayuda exterior.
Inicialmente, se aplicaron excepciones a la ayuda militar a Israel y Egipto. Según el presidente Volodimir Zelenski, Ucrania también seguirá recibiendo ayuda armamentística. Además, no se debe interrumpir la ayuda de emergencia contra el hambre. A mediados de semana, el secretario de Estado de los Estados Unidos, Marco Rubio, también incluyó en la lista de excepciones la ayuda humanitaria de emergencia que salva vidas. Esto también debería incluir la distribución de medicamentos para personas con VIH.

“Ahora todo está en el aire”, dice la activista de derechos LGBTQ botsuana Nozizwe Ntesang a DW. “Nuestra mayor financiación proviene de Estados Unidos, a través del Plan de Emergencia del Presidente para la ayuda para el SIDA (PEPFAR)”, explica a DW. La organización de Nozizwe se llama LEGABIBO (Lesbianas, Gays y Bisexuales de Botsuana).
El expresidente estadounidense George W. Bush lanzó PEPFAR en 2003. Desde entonces, el programa ha salvado la vida de aproximadamente 25 millones de personas en todo el mundo con medicamentos antirretrovirales. Hasta ahora, LEGABIBO los ha distribuido a hasta 9.000 personas por mes en clínicas ambulatorias, dice Ntesang. “Pero hoy, por primera vez en años, no había nadie en las clínicas. Si ya no reciben este tratamiento, eso representa una amenaza real para su salud. Es esencialmente una sentencia de muerte”.

¿Quién llenará el vacío que deja EE. UU. en otros países?
¿Podría Alemania, el segundo mayor donante después de EE. UU., junto con otros países, compensar la falta de dinero? Según Klingebiel, otros países “no podrían, aunque tuvieran el dinero necesario, encargarse de la logística y de la infraestructura para compensarlo” en tan poco tiempo.
A largo plazo, sobre todo China llenaría ese vacío, opina el politólogo. Entonces, EE. UU. tendría menos influencia a nivel mundial, ya que las ayudas al desarrollo también son un instrumento para ayudar a dar forma a las políticas de otros países en función de sus propios intereses.
“Un llamado de atención”
Sin embargo, hay otras voces que ven en la suspensión de la ayuda al exterior una oportunidad para los países más pobres. Como Uhuru Kenyatta, expresidente de Kenia: “Parémonos sobre nuestros propios pies”, dijo recientemente, durante un congreso sobre salud en Mombasa. “¿Por qué lloran? No es el Gobierno de ustedes, no es su país. Trump no tiene ningún motivo para darles algo. Ustedes no pagan impuestos en Estados Unidos. Esto es un llamado de atención para decir: ‘¿Qué hacemos para ayudarnos a nosotros mismos?'”.
Roshan Pokhrel, del Ministerio de Salud de Nepal, es bien consciente de que la ayuda proviene de dinero duramente ganado por contribuyentes estadounidenses. “Pero a nosotros, en países del tercer mundo como Nepal, nos gustaría poder seguir usando esos recursos de manera sensata”, subrayó. Y dijo que espera que los proyectos de Estados Unidos se reanuden transcurridos los 90 días. Esto, según él, ayudaría al mundo entero y, por tanto, también a EE. UU. como país líder en el mundo.
(cp/rml)